¿Qué es la Violencia de Pareja Íntima?
La Violencia de Pareja Íntima, anteriormente conocida como Violencia Doméstica, es un patrón de comportamiento coercitivo y controlador que incluye abuso físico, abuso emocional o psicológico, abuso sexual y/o abuso financiero entre dos parejas (NNEDV, 2017). Además, algunos abusadores pueden controlar a sus víctimas sin recurrir a la violencia, utilizando en su lugar amenazas sutiles de violencia.
El abuso físico puede tomar muchas formas, incluyendo:
- Golpear, dar puñetazos, patear, abofetear, estrangular, asfixiar u otras acciones que causen daño físico
- Usar o amenazar con usar armas
- Lanzar objetos
- Destruir propiedad
- Hacer daño o matar mascotas
- Negar el acceso a atención médica
El abuso sexual puede incluir:
- Forzar físicamente a alguien a tener relaciones sexuales
- Crear miedo alrededor de decir 'no' al sexo
- Forzar relaciones sexuales con otras personas
- Coaccionar la participación en actos sexuales denigrantes o degradantes
- Usar violencia o insultos durante el sexo
- Negar el acceso a anticonceptivos o protección contra enfermedades de transmisión sexual
El abuso emocional puede incluir:
- Críticas constantes
- Insultos o menosprecios
- Hacerte sentir que estás loco/a o manipularte psicológicamente
- Actuar con superioridad o de manera condescendiente
- Minimizar el abuso o culparte por su comportamiento
- Aislarte de tus amigos y familiares
- Celos excesivos o acusaciones de infidelidad
- Vigilar a dónde vas y con quién hablas
El abuso financiero puede incluir:
- Controlar tu acceso al dinero dándote una asignación
- Negarse a permitirte tener tu propio dinero
- Ocultar los bienes familiares
- Acumular deudas a tu nombre
- Interferir con tu capacidad para trabajar
- Dañar tu crédito